Los cinco beneficios de ser amable
De todos es sabido que ser amable nos hace sentir bien y nos llena de felicidad. David Hamilton, en su libro Los cinco beneficios de ser amable va un paso más allá, y nos descubre nuevas ventajas de la amabilidad: es buena para el corazón, retrasa en envejecimiento, mejora nuestras relaciones y es contagiosa.
La amabilidad genera cambios físicos en el cerebro, produce serotonina, que es lo que buscan potenciar algunos anti depresivos
Desencadena la liberación de óxido nítrico dilatando las arterias y reduciendo la presión arterial. La amabilidad protege el corazón. Además es un antídoto para el estrés.
Tiene la capacidad de frenar siete procesos de envejecimiento: el estrés oxidativo, el agotamiento del óxido nitrico, el acortamiento de los telómeros, la degeneración muscular, la disminución del tono vagal y la inflamación.
La amabilidad nos ayuda a brillar, a ser lo mejor que podemos ser. Hace que las amistades y las relaciones sean exitosas.
Y lo mejor de todo, se contagia. Cuando vemos acciones o personas bondadosas, nos invade el deseo de imitarlas y hacer entre todos un mundo más amigable.